"Pensé que me podría haber muerto"

-¿Qué fue lo primero qué pasó por tu cabeza luego del accidente?

-No sabía ni me acordaba de nada hasta los primeros días de sala común, porque en terapia tenía pocas imágenes. Me acuerdo de toda mi familia estando al lado mío porque me podía haber pasado la peor, que por suerte no sucedió.

-¿Pensaste que podrías haber muerto?

-Sí, pensé eso, que me podría haber muerto. Por lo que me contaron: cómo había pasado, cómo había quedado, después de los cinco días en terapia intensiva con respirador. Por suerte zafé.

-¿Es un volver a nacer?

-Sí, la verdad que volví de nuevo. Después de eso uno tiene otro pensamiento, cambié mucho después del accidente porque podés perder todo lo que tenés por un segundo, porque no sé qué me pudo pasar en el auto.

-¿Y ahora cómo estás?

-Físicamente bien, sólo me queda hacer un estudio del músculo de bíceps para saber si está roto o no para recuperarlo. Después, de la cabeza, todavía no estoy al cien por ciento. Eso es lo más difícil.

-Hagamos un retroceso, ¿Cómo fue tu infancia?

-Linda por suerte. Empecé a jugar al fútbol a los 4 años en un club de baby que se llamaba la Meca en Villa Adelina (Bs.As.). A los 9 años pasé a River, hice las infantiles y luego de 9na. división hasta reserva. Ahí quedé libre y me fui a Santamarina (Tandil).

-Dentro de esos compañeros en River ¿estaba Buonanotte?

-Sí, incluso hasta el día de hoy tengo buena relación y nos comunicamos. Sé que parte de lo que me pasó y que me salvé la vida fue por él, porque él venía con cinturón de seguridad y yo me salvé por eso. La mala fortuna que tuvo él, me salvó a mí.

-¿Lo hablaste con él?

-Todavía no porque no está en el país. Pero se enteró y me dijeron que me mandó saludos.

-¿Por qué elegiste ser futbolista?

-Me gustó desde chico, siempre tuve responsabilidades y desde los 9 años sabía qué tenía que hacer. Ahora me gusta más porque nunca tuve una lesión y hoy que estoy afuera me hace falta estar adentro y siento que esto es lo que quiero hacer.

-¿Terminaste la escuela?

-Me faltan un par de materias, pero fui a la escuela.

-¿El primer sueldo?

-Fue en la reserva de River. Fueron $150 pesos. Después me enteré que era muy poco para lo que se pagaba en River.

-¿Se vive bien del fútbol?

-La verdad que sí. Vivo contento, feliz y cómodo del fútbol. Por suerte no me hace faltar nada.

-¿Cómo te llevás con el mundo de las botineras?

-(Risas) Por suerte estoy de novio hace bastante tiempo y tengo esa compañía que hace falta.

-¿Qué significa Desamparados?

-Una parte importante de mi vida cotidiana y futbolística porque conseguí mi primer ascenso en mi corta carrera, porque este es mi tercer año como profesional. Además sentí mucho el apoyo de la gente que pidió por mí, sin conocerla.

-¿Y el ascenso?

-Una alegría inmensa. Todavía pienso en lo que sufrimos y pasamos. Lo que se dijo, que no creían en nosotros y lo logramos. Nos criticaron y demostramos que podíamos y creíamos en nosotros.

-¿Quién es Gerardo Corvalán?

-Una persona sencilla, que trata de ser buen compañero y mejor persona.

-¿Cómo y dónde te ves dentro de 15 años?

-Espero seguir todavía jugando al fútbol y estando lo mejor posible y disfrutando de la vida.

-¿Hoy crees en esa segunda oportunidad que te da la vida?

-Sí, esta es una segunda oportunidad. No estaba haciendo las cosas mal y no sé por qué pasó, pero son cosas que te marcan la vida y hoy tengo otra vida, con otro pensamiento y ahora a disfrutar el día a día y que venga lo que venga.

Fuente