Si no se sufre, en Sportivo Desamparados no se goza. Esa es su bandera para seguir alimentando la esperanza de una Promoción por el ascenso a la B Nacional. Con eso le sobra para seguir avanzando en este durísimo tramo de la post-termporada del Argentino A. Con eso, con su corazón, le alcanzó para quebrar la resistencia de un Central Norte de Salta durísimo, que siempre supo lo que quería y que casi se lleva desde San Juan lo que vino a buscar de no haber sido el tremendo gol de Santiago Ceballos, que faltando apenas 3 minutos para el final, armó la jugada de su vida y definió con pura fantasía. Solo así lo podía ganar Desamparados. Sufriendo para gozarlo. Bien a lo Sportivo.
En el comienzo, tal cual era planteado por la previa y sus necesidades, Sportivo salió decidido a manejar la pelota. Trató de hacerlo con paciencia, sin dividirla nunca y buscando en la triangulación el mejor camino para llegar al arco de Maino. Esos primeros 20 minutos fueron de lo mejor futbolísticamente porque generó por los costados y llegó. La más clarita fue la de Salinas, que apareció solo por la derecha y decidió buscar el arco. Pero Central Norte tenía lo suyo y respondió con peligro. Diego Magno tuvo el gol en un error defensivo de Sportivo, pero Aguiar lo esperó bien y resolvió con enorme categoría. A los 22' Matías Garrido tuvo sus chances pero no alcanzó a quebrar la resistencia defensiva de los salteños. Desamparados era más pero no lo concretó. Ese déficit le pasó factura porque el Cuervo salteño se acomodó mejor, dividió la posesión de la pelota y controló a Sportivo.
En el complemento, con otra carga de ansiedad, Desamparados ya no pensó tanto el juego. Fue a buscarlo a corazón abierto y ya con menos piernas. Eso, le favoreció a Central Norte que empezó a manejar la pelota con criterio y fue adormeciendo a Desamparados. Así y todo, Sportivo tuvo sus chances. A los 14', Reinoso remató desviado después de una buena jugada colectiva. Y claro, del otro lado también hubo peligrosas como la de Sergio Oga que, solito, la tiró afuera increíblemente.
Para Desamparados era otra vez ir por el milagro. Sin fútbol, sin piernas, con más coraje que otra cosa. Y fue. Garay metió cambios. Buscó aire y velocidad con los ingresos de Santiago Ceballos y de José Sánchez. Parecía que no se le daba. Central esperaba cada vez más seguro y entrarle se complicaba demasiado.
Pero llegó el minuto 42 y la mística que gobierna el mundo de Puyuta decidió hacerse presente. Ceballos encaró, tiró la diagonal de derecha a izquierda y cuando vio a Maino adelantado, eligió la belleza para definir una noche cargada de ansiedades. De zurda, con sutileza, eligió el segundo palo del arco de Central y clavó un golazo para la historia. Era premio. Merecido por la actitud y la convicción de un Desamparados que parece armado, diseñado y forjado para el sufrimiento. Desamparados es así y si no que le pregunten a Douglas Haig y a los salteños.
En el comienzo, tal cual era planteado por la previa y sus necesidades, Sportivo salió decidido a manejar la pelota. Trató de hacerlo con paciencia, sin dividirla nunca y buscando en la triangulación el mejor camino para llegar al arco de Maino. Esos primeros 20 minutos fueron de lo mejor futbolísticamente porque generó por los costados y llegó. La más clarita fue la de Salinas, que apareció solo por la derecha y decidió buscar el arco. Pero Central Norte tenía lo suyo y respondió con peligro. Diego Magno tuvo el gol en un error defensivo de Sportivo, pero Aguiar lo esperó bien y resolvió con enorme categoría. A los 22' Matías Garrido tuvo sus chances pero no alcanzó a quebrar la resistencia defensiva de los salteños. Desamparados era más pero no lo concretó. Ese déficit le pasó factura porque el Cuervo salteño se acomodó mejor, dividió la posesión de la pelota y controló a Sportivo.
En el complemento, con otra carga de ansiedad, Desamparados ya no pensó tanto el juego. Fue a buscarlo a corazón abierto y ya con menos piernas. Eso, le favoreció a Central Norte que empezó a manejar la pelota con criterio y fue adormeciendo a Desamparados. Así y todo, Sportivo tuvo sus chances. A los 14', Reinoso remató desviado después de una buena jugada colectiva. Y claro, del otro lado también hubo peligrosas como la de Sergio Oga que, solito, la tiró afuera increíblemente.
Para Desamparados era otra vez ir por el milagro. Sin fútbol, sin piernas, con más coraje que otra cosa. Y fue. Garay metió cambios. Buscó aire y velocidad con los ingresos de Santiago Ceballos y de José Sánchez. Parecía que no se le daba. Central esperaba cada vez más seguro y entrarle se complicaba demasiado.
Pero llegó el minuto 42 y la mística que gobierna el mundo de Puyuta decidió hacerse presente. Ceballos encaró, tiró la diagonal de derecha a izquierda y cuando vio a Maino adelantado, eligió la belleza para definir una noche cargada de ansiedades. De zurda, con sutileza, eligió el segundo palo del arco de Central y clavó un golazo para la historia. Era premio. Merecido por la actitud y la convicción de un Desamparados que parece armado, diseñado y forjado para el sufrimiento. Desamparados es así y si no que le pregunten a Douglas Haig y a los salteños.
Las Claves
1 Actitud. Esa es la bandera ganadora de Sportivo en este tramo del torneo. Con eso le sobra para seguir ilusionado.
2 Orden. En la primera parte, Desamparados hizo mejor las cosas pero luego se quedó y se desordenó por el cansancio.
3 Respeto. Central Norte sabe lo que hace y lo que quiere. Cuando pudo, manejó la pelota y los tiempos del partido.
Uno X Uno
1-Diego Aguiar 5 Seguro para cortar y controlar todo en el arco.
4-Tomás Salinas 4 Tuvo un error gravísimo que casi le cuesta caro a Sportivo.
2-Ariel Barth 5La solvencia de siempre para ordenar y cuidar el fondo.
6-Mauricio Del Cero 5 Anticipó y rechazó ante la complicación.
3-Omar Díaz 5 Fue salida y se animó a subir para darle profundidad.
5-Gerardo Corvalán 5 Mucho despliegue en la marca y la recuperación.
8-Hernán Lamberti 5 Arrancó como un batallador y finalizó extenuado.
11-Augusto Alvarez 5 Cuando encontró la pelota, tuvo juego el equipo.
10-Matías Garrido 5 Pinceladas y gambetas para inquietar, pero sin llevar peligro.
7-Cristian Pérez 5 La misma energía de siempre para buscar en el área rival.
9-Emmanuel Reinoso 4 El más estático y lejos de la pelota en el equipo.
INGRESARON: 18-S. Ceballos, 17-J. Sánchez y 16-M. Guirado: sin calificación.
Ceballos entra sólo para dar alegrías
Ingresó en el complemento y a falta de tres minutos facturó. Para desatar la alegría contenida por los hinchas. Se tiró al piso, se paró, se arrodilló, miró al cielo y la dedicatoria, como siempre, para su hermano que lo alumbra desde el cielo. Fue un golazo. Porque definió desde afuera del área por encima de arquero Mariano Maino que estaba increíblemente adelantado, ya que había tenido una noche ideal. "Me limpiaron la jugada y lo ví adelantado", contó el delantero sobre su conquista para darle el triunfo al Víbora.
Pero claro, contra las estadísticas nada se puede hacer. Santiago volvió a saltar desde el banco de suplentes. Fue para sustituir a Cristian Pérez ante el asombro y la indignación de los hinchas para con el técnico Garay, sin entender que Ceballos sería, otra vez, el héroe y salvador para el primer partido en busca de meterse en la final para ganarse un lugar en la Promoción.
Lo de Santiago ya es una constante. Tiene un lustro de festejos en la temporada (Estudiantes de Río IV, Juventud Unida, Sportivo Belgrano y Talleres, sumado al de anoche a Central Norte) y cuatro de ellos en esos minutos finales que son para infarto. Porque cuando con buscar no alcanza la llave parece estar en el banco. "Santi adentro", dijo Garay, y Ceballos le ratificó esa confianza, porque sólo entra para darle alegrías al equipo.
Fuente: Diario de Cuyo
Pero claro, contra las estadísticas nada se puede hacer. Santiago volvió a saltar desde el banco de suplentes. Fue para sustituir a Cristian Pérez ante el asombro y la indignación de los hinchas para con el técnico Garay, sin entender que Ceballos sería, otra vez, el héroe y salvador para el primer partido en busca de meterse en la final para ganarse un lugar en la Promoción.
Lo de Santiago ya es una constante. Tiene un lustro de festejos en la temporada (Estudiantes de Río IV, Juventud Unida, Sportivo Belgrano y Talleres, sumado al de anoche a Central Norte) y cuatro de ellos en esos minutos finales que son para infarto. Porque cuando con buscar no alcanza la llave parece estar en el banco. "Santi adentro", dijo Garay, y Ceballos le ratificó esa confianza, porque sólo entra para darle alegrías al equipo.
Fuente: Diario de Cuyo
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