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jueves, 23 de junio de 2011

El primer objetivo

Se puede. Ese tal vez sea el mensaje que dejó el ajustado pero merecido triunfo de Sportivo Desamparados sobre San Martín de Tucumán en el primer partido de la serie de Promoción buscando un lugar en la Primera B Nacional.

El primer objetivo fue cumplido por el conjunto sanjuanino y lo que viene, será ahora responsabilidad de los tucumanos que están obligados a ganar en su cancha y a revertir esta historia. A Desamparados no le sobró nada pero le alcanzó todo su enorme amor propio para resolverlo cuando alcanzó su mejor producción en todo el partido. Ese gol de Lisandro Beratz, a los 30 minutos del primer tiempo, fue el premio merecido al coraje para ir a buscarlo con todo lo que tiene este Desamparados.

Es que había empezado complicado con la presión de los tucumanos que, con Daniel Pereira como abanderado, le copó el mediocampo y le cerró los caminos a Lencina. Sportivo intentó sacudirse a partir de la reacción de Lamberti, Corvalán y Alvarez.

Con mucha personalidad, disimuló errores y los convirtió en virtudes a través del simple recurso del pelotazo que desnudaron dudas en los zagueros tucumanos. Así llegó tres veces a través de Reinoso y de cabeza. Y a los 26’ ya anunció que se venía el gol cuando Barth se encontró con un rebote corto en el corazón del área, rematando por arriba. Hasta que a los 30’, llegó el corner de la victoria desde la derecha, la dejaron corta y Beratz, con alma y vida, le entró para dejar sin respuestas al arquero tucumano.

Desde ese instante, Sportivo fue más. Decididamente más y solamente se equivocó en no definir el pleito con otro gol. Como ese que se comió Cristian Pérez a los 39’ de esa primera parte.

En el segundo tiempo, Desamparados le dejó el peso de ir a buscar el empate a San Martín y se le paró de contra. Los tucumanos se jugaron un poco más con el ingreso del Ratón Ibañez y en los primeros 10’ se adueñaron del trámite aunque sin profundidad. A los 11’ Oviedo, el conductor de San Martín, se fue expulsado por una violenta infracción sobre Augusto Alvarez. Parecía ideal el movimiento porque Sportivo estaba en ventaja en el marcador y también en jugadores.

Era cuestión de decidirse a ir a buscar el segundo gol pero la pregunta que faltaba hacerse también era si había con qué. Porque los 45 partidos de esta temporada ya se hicieron sentir y Desamparados perdió la explosión. Pero claro, así y todo estuvo cerca a los 15’ cuando Cristian Pérez la enganchó de aire y obligó a la tapada de la tarde de Lencina, que la sacó al córner con el pie. Desamparados fue y fue. Se jugó Garay con el ingreso de Santiago Ceballos y el retraso de Gerardo Corvalán pero ya no existía la misma reacción en todos. Era coraje. Ganas. Actitud para tratar de duplicar la ventaja y esperar el viaje a Tucumán con más tranquilidad.

Pero la austeridad es la bandera de este utilitario Desamparados que empezó a convencerse de que ir paso a paso es lo suyo. El primer objetivo estaba cumplido. Lo primero era ganar y lo estaba logrando. Ahora, el desafío es ir a Tucumán, bancar y sacar pecho para comprobar que esa receta tiene sustento. Desamparados ganó sin que le sobre nada pero tampoco sin que le falte. Bien a lo Sportivo. Sabiendo que estos mano a mano se bancan lo que sea.
 
Un Dato Alentador
Desde que se implementó la Promoción, se jugaron 8 series y en la definición 2005-06 San Martín de Tucumán logró ganarle a San Martín de Mendoza viniendo desde el Argentino A por 1-0 en la ida y luego ascendió empatando sin goles. En las otras series ninguno de los aspirantes del Argentino A pudo ganar en la ida.
 
Las Claves
Actitud. Con la reservas físicas al límite, sabiendo que tuvo rival de otra categoría, Desamparados buscó el primer objetivo de esta serie con total autoridad y con eso le alcanzó para ganar y esperar.
Lo mejor. Los últimos 25 minutos del primer tiempo mostraron lo mejor de Sportivo en la serie inicial con los tucumanos. Presionó, jugó, generó y llegó a su ventaja, mínima pero elemental para la revancha.
Lo peor. En los últimos 25 minutos de partido, Desamparados se quedó sin la explosión que necesitaba para buscar ese otro gol tranquilizador. Le jugó en contra el cansancio y el desgaste de los viajes.
Su dulce sabor de revancha
Tanto en la vida como detrás de la redonda, la revancha y esa oportunidad siempre llega. Detrás de un dolor, siempre viene la cura para sonreír. Perder y después ganar, manda. Y en el fútbol ese momento está latente para Lisandro Beratz. El marcador central viene de no poder ascender la temporada pasada con Santamarina de Tandil cuando perdió la Promoción ante la CAI. Ayer, la revancha le sentó de la mejor manera y con un plus. Anotó el tanto del triunfo, el primero en Desamparados y encima tuvo un desempeño bárbaro para ser el pilar del triunfo sobre San Martín por 1-0. El martes, en la previa al partido, le confesó a DIARIO DE CUYO que “en lo personal es una revancha y quiero concretar lo que se me negó el año pasado”. Y ese dulce sabor tuvo final feliz para el bahiense. En aquella Promoción ante la CAI también estaban Ariel Barth y Gerardo Corvalán, pero a diferencia de Lisandro ninguno lo tomó como cuenta pendiente en lo personal. Por ello la dimensión del logro del espigado defensor puyutano. “Estoy muy feliz, buscamos ganarlo en nuestra cancha y se consiguió. Tuvimos presencia, hombría y nunca nos llevaron por delante y superamos a un equipo grande”, argumentó tras el triunfo. Pero en su rostro, que muy pocas veces resulta expresivo, había una enorme sonrisa. El gol formó parte de ello. “Se hizo esperar pero llegó en el partido más esperado. Es el primero en Desamparados y el primero de mi carrera con zurda. Lo venía buscando y llegó en un momento muy importante para el grupo”, confesó. Luego, tuvo su análisis de lo que viene, sabiendo que con un empate el domingo en Tucumán el ascenso se habrá consumado. “La diferencia del 1-0 es importante porque es la misma que las de las anteriores definiciones. Ahora ellos tendrán la presión y nosotros seguir haciendo nuestro trabajo, ese que nos puso en esta instancia”. El domingo puede ser el gran día y Lisandro Beratz sabe que ayer dieron un paso importante para lograrlo. “Estamos cerca y es lo que esperamos, sólo falta lo más importante, quedan 90 minutos y vamos a Tucumán por el ascenso”, cerró Lisandro, quien ayer tuvo ese dulce sabor de la revancha, que lo dejó cerca del objetivo.
 
Fuente: Diario de Cuyo 

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