En 50 días se definirá todo. Desde el domingo próximo y hasta el 15 de mayo, se peleará por un lugar en la Primera B Nacional. Los nueve clasificados a la fase final del Argentino A tienen un largo periplo por delante. Esto más que una frase hecha, es una realidad, y unos más y otros menos tendrán que planificar de la mejor forma los viajes y las concentraciones, que jugarán un papel fundamental para estar con el descanso adecuado para cada uno de los juegos. El equipo que más deberá andar en este certamen es Guillermo Brown de Puerto Madryn, que a pesar de ser el mejor de la tabla general, se verá perjudicado por su ubicación geográfica y por la conformación del fixture. Los de la provincia de Chubut tendrán que recorrer 13.048 kilómetros, entre ida y vuelta, para disputar los 4 encuentros de visitante. Ellos deberán afrontar el viaje más largo de todos, ya que entre la ciudad de las ballenas y Salta hay 2.144 kilómetros de ida, que los deberán unir cuando se enfrenten a Central Norte. Un recorrido que por vía terrestre demanda unas 27 horas a una velocidad constante de 80 kilómetros por hora, repitiéndose en el regreso. El segundo equipo más perjudicado es Central Norte, que deberá hacer 11.302 kilómetros, siendo sus destinos más lejanos Tres Arroyos y Mar del Plata. Completa este podio indeseado Desamparados, que deberá transitar 8.714 kilómetros por las rutas argentinas. Esto, traducido en tiempo, significará para el plantel sanjuanino casi 5 días arriba de un colectivo, esto sin tener en cuenta las detenciones para comer y demás necesidades. En definitiva, para lograr el objetivo hay un largo camino por delante.
Fuente: Diario el Zonda
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